18 enero 2018

El paso del Manzanal en la N-VI

Tradicionalmente las comunicaciones entre Galicia y la meseta han sido motivo de numerosas complicaciones dada la barrera orográfica conformada por los montes de León y el área más occidental de la cordillera cantábrica. Hasta la llegada del Plan de Accesos a Galicia y sucesivos, las carreteras eran sinuosas y difíciles, lo que unido a la climatología húmeda del noroeste español añadía un plus de peligrosidad. El tramo que hoy traigo a esta página es el puerto del Manzanal, entre Bembibre y Astorga en la N-VI, carretera de Madrid a Coruña, uno de esos pasos conflictivos que recibió una notable mejora gracias al plan mencionado y a otros como el Redia (Red de Itinerarios Asfálticos, en vigor entre 1967-1971 pero cuyas obras duraron hasta varios años más tarde), el cual dotó a esta carretera de un paso notablemente más limpio y rápido. Encontramos el trazado original en color verde y marcado como N-006A:


En la siguiente captura podemos ver el puerto tal y como era originalmente gracias a la fototeca digital del Instituto Geográfico Nacional y los vuelos realizados entre 1956 y 1957, previos a la primera mejora de calado.


Como podemos observar, el trazado era una continua sucesión de curvas, aunque en la siguiente captura ya podemos apreciar la variante realizada para evitarlas. Recurrimos de nuevo a los vuelos del IGN, en este caso los realizados entre 1980 y 1986.


La variante trajo consigo una notable mejora y comodidad para el conductor con la eliminación del sinuoso trazado anterior. Hoy en día el acceso central a tierras gallegas ha sido perfeccionado con la construcción de la autovía A-6, y si el tráfico por la N-VI reformada ha quedado reducido al mínimo más absoluto (y reservado para nostálgicos...), qué decir de la carretera que protagoniza este post.

Partimos de Bembibre, con la mirada puesta en la antigua N-VI, hoy degradada a categoría de carretera local, concretamente la LE-106. Tomamos dirección a Torre del Bierzo y La Silva. La carretera serpentea ajustada a los "accidentes" orográficos y encajada entre el arroyo de La Silva y la actual N-VI. De vez en cuando aparecen silenciosos testigos del paso de la carretera radial por aquí y que décadas más tarde aún permanecen en pie, como si reclamasen el reconocimiento debido a la importancia de esta vía de comunicación entre Galicia y el resto de España. El número 359, correspondiente a la distancia desde el famoso Km. 0 madrileño, no deja lugar a la duda.


Esta carretera recibe en este entorno numerosas y variopintas denominaciones, LE-106, N-6, N-VI y la más bizarra de todas, "N-006A", como podremos encontrar de forma repetida.


En este punto, hemos abandonado la carretera local para tomar la actual N-VI y cruzar por debajo de la autovía A-6, para pocos metros más adelante dejarla nuevamente y comenzar a explorar el tramo abandonado objeto de este reportaje. Nos reciben estas viejas señales de diciembre de 1973.


Tomamos dirección a Brañuelas y Ponferrada, dejando de lado la N-VI y los viaductos construidos para evitar el barranco, como podemos ver en la siguiente fotografía.


Me sorprende que sobreviva la señalización vertical después de tantos años y la pérdida de importancia de la carretera. En este mismo viaje pude comprobar en un tramo abandonado de N-525 cómo habían arrasado recientemente con toda la señalización, dejando al menos los hitos de piedra.


Más de medio siglo han visto pasar, como figura en la inscripción del Ministerio de Obras Públicas.



El viaducto de la Redia y la autovía A-6 vistas desde la carretera vieja, desde este lugar se siente cierta nostalgia viendo el tráfico que ahora discurre por la autovía y que jamás volverá a pasar por aquí. Al menos así nos queda la opción de hacer este recorrido con la tranquilidad propia de una carretera prácticamente abandonada.





Llegamos al cruce de Brañuelas, quizá este tramo tenga aún cierto mantenimiento con el fín de dar servicio a esta localidad, no por nada más...






Algo hay en esa peña junto a la carretera...



Se trata de un clásico de las carreteras españolas de hace medio siglo, la publicidad de Ulloa Óptico, negocio que comenzó hace varias décadas a instalar sus rudimentarios anuncios por las rocas y ribazos que lindaban a las principales vías del país y que resultaban aparentes para ser visualizadas por los conductores. Una sentencia del Tribunal Supremo obligó en enero de 1975 a su borrado debido a que "distrae la atención del conductor y perjudica la estética del paisaje", según recoge el diario El País en su edición del 22 de abril de 1977. La "pintada" publicitaria se aprecia pese a los años transcurridos, y se puede encontrar también en la cercana N-536, a su paso por la localidad de Puente de Domingo Flórez, en el antiguo trazado de la N-120 que fue sustituido por una nueva carretera entre O Barco do Valdeorras y el enlace con la N-VI en Ponferrada.

Seguimos adelante y continúan apareciendo señales antiguas, que se mezclan con las más recientes y que recogen el nuevo nombre de N-006A.





Hasta aquí llega la carretera antigua, tomamos de nuevo la N-VI actual.


Continuamos viaje en dirección a Manzanal del Puerto, localidad que como es obvio, da nombre al alto, y en la cual volveremos a salir del trazado Redia para recorrer otro pequeño tramo más antiguo. Aquí encontramos un hito tipo Peña cuyos caracteres han sido eliminados, así como un hito metálico que hace referencia al nuevo nombre. Junto a ellos, podemos apreciar una hilera de bordillos. Este encintado delimitaba los bordes de la carretera y servía en cierto modo para "sostener" el material del que se componía el firme y que este no se esparciese. Esto comenzó a generalizarse a partir del Plan de Modernización de 1950, aunque ya desde el Circuito Nacional de Firmes Especiales de 1927 se abogaba por el afirmado o pavimentado de estos viejos firmes de macadán, consistente en un compuesto de áridos de diferentes grosores.



Volvemos nuevamente a la N-VI...


Parece que a juzgar por la clave de carretera del hito pequeño (N-IV en vez de N-VI) estamos en las inmediaciones de la localidad cordobesa de Villa del Río y no en pleno Bierzo leonés... A unos metros en línea recta un aficionado se ha encargado de restaurar un viejo hito de piedra que sobrevive junto al trazado original. Mi más sincera enhorabuena por tomarse la molestia de hacer lo que la Administración podría hacer sin excesivo dispendio de dinero o personal.


Junto al hito podemos apreciar nuevamente el característico encintado de piedra.




Es hora de volver a la N-VI, comenzamos a perder altitud bajando en este caso por la larga pendiente que el plan Redia construyó como alternativa al puerto.


Hacemos una incursión en Pradorrey, localidad que tiene el privilegio de conservar numerosos elementos de la antigua N-VI como son un pequeño tramo abandonado en el que aún perduran las lineas centrales amarillas, un hito Peña, señalización antigua que mantiene la denominación N-VI y hasta un hermoso toro de Osborne junto a la variante Redia.





El toro parece tener doble tarea hoy en día, hasta hace unos años vigilaba el tráfico de la carretera nacional, ahora se le suma la moderna A-6...





Aquí finaliza este viaje por el Puerto del Manzanal y sus trazados, ahora toca continuar el viaje por la N-120, que también tiene lo suyo, pero eso ya queda para otra entrada...

Este mismo reportaje también está disponible en la página de Facebook de Carreteras Abandonadas (antes Carreteras Radiales).

2 comentarios:

  1. Buenas, un pequeño detalle, el puerto del manzanal está entre Astorga y Bembibre. Tienes puesto que está entre Bembibre y Ponferrada

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